10 enero, 2010

A dónde va un biólogo cuando muere?

La mayoría de los biólogos somos agnósticos o ateos; pero, si existiera el cielo y el infierno, esta historia podría llegar a ser más que ficticia…
Se murió un biólogo y se fue a las puertas del cielo. Es sabido que los Biólogos, por su honestidad, siempre van al cielo. San Pedro buscó en su archivo, pero, como últimamente andaba un poco desorganizado, no lo encontró en el montón de papeles y le dijo: “Lo lamento, no estás en la lista…”, de modo que el biólogo se fue a las puertas del infierno y donde le dieron albergue.
Ya establecido en el infierno, vendió su alma al diablo para realizar los mejores proyectos (tal como le enseñaron en la Universidad), y se puso a controlar las cocinas y calderas, hizo un análisis bacteriológico y fisicoquímico del agua de los pantanos, analizó el suelo, controló las plagas, implementó el reciclaje de nutrientes, explotó los recursos del infierno, estandarizó la temperatura y humedad del ambiente e hizo del infierno un lugar mucho más cómodo, convirtiéndolo en un paraíso tropical (bosque tropical perennifolio con lluvias todo el año, para ser más exactos).
Con el paso del tiempo, el infierno ya tenía su Sistema de Información Geográfica, ISO 9001,  BPM, legislación ambiental para el manejo de residuos y daños al ambiente, sistema de monitoreo de cucarachas y hormigas, invernaderos, criaderos de truchas, aire acondicionado, excelente temperatura, inodoros controlados, escaleras eléctricas, equipos automatizados, redes de telecomunicaciones, programas de mantenimiento predictivo, sistemas de control de laboratorio, sistemas de detección de incendios, termostatos digitales, etc. y casi todo funcionando en base a energías renovables. El biólogo se hizo de muy buena reputación. 
Un día Dios llamó al Diablo por teléfono y con tono de sospecha le preguntó: 
— Y ¿qué me cuentas diablo? ¿Cómo van las cosas por el infierno? 
— ¡Estamos de la p**a mare por aquí!. Tenemos ISO 9001, plagas controladas, sistema de monitoreo, aire acondicionado, inodoros controlados, escaleras eléctricas, equipos electrónicos, Internet, sistemas de control de laboratorio, etc. y casi todo funcionando en base a energías renovables. Oye, mas bien apúntate mi nueva dirección de e-mail eldiablofeliz@infierno.com… La verdad es que no sé cuál será la próxima sorpresa del biólogo. 
— ¡¿Qué?!, ¡¿Que?! ¿TIENEN UN BIÓLOGO ALLÍ? Esto debe ser un error, nunca debió haber llegado un biólogo por ahí. Los biólogos siempre van al cielo, eso está escrito y resuelto ya. ¡Me lo mandas inmediatamente!. 
— ¡Espérate un momentito Dios, el biólogo no saldrá de aquí! Me gusta tener un biólogo de planta en la organización, me voy a quedar con él por toda la eternidad.
— Mándamelo o ¡TE DEMANDARÉ!
Y el Diablo, con la vista nublada por la tremenda carcajada que soltó, le contestó a Dios:
— ¿Ah sí?, y por curiosidad, ¿de dónde sacarás un abogado si todos andan por aquí?
Simplemente, debemos entender a los biólogos, amarlos y respetarlos, darles todo el dinero que pidan para investigar, por que gracias a ellos vivimos en un mundo cada vez mejor.

Y recuerden que:

a) Un biólogo no tiene vida desorganizada, es solo que tiene un ritmo de vida particular.
b) Un biólogo no ve el mundo, lo cambia. 
c) Un biólogo no es un crítico, es que los errores de la gente son muy evidentes.
d) Un biólogo no es un inútil para hacer tareas cotidianas, es que para qué demonios gastar sus valiosas energías en bobadas y, además, un trapeador es una máquina muy obsoleta que no puede ser configurada. 
e) Si bien el biólogo estudia la vida, no tiene una.
f) Un biólogo no comete errores, ¡solo prueba si los demás estaban prestando atención!

Bueno, no pude rastrear la fuente original de este pequeño relato, lo encontré aquí, aquí y aquí.

Así que como moraleja: A donde valla un biólogo siempre se hará respetar, necesitar y extrañar; pero, debemos cobrar por hacerlo porque sino pasaremos toda nuestra vida de VOLUNTARIADO en VOLUNTARIADO¡

Y ya que hablábamos de dios, alguna vez se han preguntado por que Eva nació de la costilla de Adán…

20100110

Vía SMBC-Comics.

2 comentarios:

  1. Buena entrada. la biología ha revolucionado literalmente la comprensión de lo qué es la vida y nuestro modo de vivir, por ejemplo: salud, alimentación etc.El mismo post, en forma humorística y también real, ya que el humor es una de las formas de hablar de la realidad, lo muestra en la transformación que el biólogo hace del infierno (lo inferior es elevado a un paraíso)Lamentablemente estos aportes de la biología no son conocidos y, sobre todo, entendidos por el común de las personas.

    un saludo desde Chile

    ResponderBorrar
  2. Buena entrada, como biólogo me da gusto leer este tipo de cuentos que como indicas, son ficticios pero no dejan de ser interesantes.

    SALUDOS

    ResponderBorrar

Se respetuoso con tus comentarios y críticas. Cualquier comentario ofensivo será eliminado.